LACTANCIA: MÁS QUE ALIMENTAR, UN VÍNCULO ÚNICO
Dar el pecho es un acto natural, pero eso no significa que siempre sea fácil. Entre el cansancio, la recuperación del parto y el ritmo de vida, muchas madres enfrentan dudas y dificultades. Sin embargo, cuando la lactancia fluye, los beneficios son enormes, tanto para el bebé como para la madre.
POR QUÉ LA LECHE MATERNA ES ESPECIAL
CUANDO AMAMANTAR NO ES TAN FÁCIL
A veces la lactancia no sale como esperamos. Puede haber dolor, dudas o simplemente un ritmo de vida que no lo pone fácil. Se trata entonces de encontrar lo que funcione para cada familia.
Si hay dificultades, buscar apoyo puede marcar la diferencia. Las Consultoras de Lactancia Certificadas (IBCLC) están especializadas en ayudar con:
IBCLC: Tu aliada en la lactancia
Las IBCLC no solo te dan información, te acompañan en el proceso, te escuchan y te ayudan a encontrar soluciones cuando las cosas no salen como esperabas. Están certificadas por el International Board of Lactation Consultant Examiners (IBLCE) (https://iblce.org/), lo que significa que han pasado por una formación intensa, muchas horas de práctica y un examen bastante exigente para poder ofrecerte la mejor ayuda posible. Además, deben seguir actualizándose cada cinco años para estar al día con los últimos avances en lactancia.
Puedes encontrarlas en hospitales, clínicas o en consulta privada, siempre con el mismo objetivo: hacer que la lactancia sea más posible y llevadera. Entre otras cosas, te pueden ayudar con:
La lactancia no siempre es como la imaginamos, pero con el apoyo adecuado, puede convertirse en un momento único de conexión con tu bebé. Si sientes que necesitas ayuda, una IBCLC puede ser justo la persona que estás buscando.
EL FISIOTERAPEUTA, UN GRAN ALIADO
La lactancia no solo depende de la voluntad de la madre o del bebé, sino también de su bienestar físico. Ahí es donde el fisioterapeuta puede ayudar con:
CADA GOTA CUENTA
No importa si es una toma al día, unas semanas o varios años. Cada gota de leche materna aporta beneficios. Y si en algún momento decides que la lactancia no es para ti, también es una posibilidad. Lo importante es que la maternidad sea una experiencia positiva y libre de culpas.
Las principales organizaciones de salud, como la OMS y la AEP, recomiendan la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses y complementaria hasta que madre e hijo lo deseen. Pero cada historia es única, y lo mejor siempre será lo que funcione para cada familia.